La septoplastia es una operación por medio de la cual se corrigen desviaciones importantes el tabique y el cartílago, los cuales se encargan de dividir las fosas nasales.
Cuando hay una desviación en esta zona de la nariz, el proceso de la respiración tiende a dificultarse, ocasionando diversas molestias en las personas con este problema.
Los tabiques desviados obligan a las personas a respirar por la boca y no por la nariz como es correcto. En ese cao, el drenaje de fluidos nasales genera congestión y esto a su vez lleva al nacimiento de infecciones.
Otra de las consecuencias de tener el tabique desviado, radica en que al respirar por la boca, esta se reseca. Por lo que lo más recomendable es realizar el procedimiento quirúrgico que regrese el hueso a su lugar natural y mejore la calidad de vida del paciente.
Así se realizan las intervenciones por septoplastia
Para poder enderezar el hueso y los cartílagos que conforman el tabique, los galenos deben recurrir a una intervención quirúrgica, la cual es fácil de realizar y sin riesgos graves.
Se trata de una cirugía mayor, en la que el paciente debe estar sedado por completo, o solo con anestesia local si es leve.
Las operaciones de este tipo suelen durar entre una y dos horas, según la atrofia del paciente quien puede ser enviado a su casa el mismo día de la operación.
La septoplastia se lleva a cabo por medio de una incisión a través de la cual se extrae parte del hueso, se reacomodan los tejidos y cartílagos, para finalmente reinsertar el hueso dentro de la cavidad y en la posición correcta.
La mejoras en el proceso respiratorio son inmediatos, más el paciente debe esperar que se desinflamen las mucosas, lo cual puede demorar entre tres y siete días, esto dependerá de la evolución de cada paciente.
Riesgos que se pueden presentar tras una septoplastia
Las cirugías por septoplastia, al igual que en cualquier otra intervención quirúrgica, tiene algunos riesgos.
Algunos de los efectos secundarios que puede acarrear una operación quirúrgica de este tipo incluye sangrado abundante, obstrucciones nasales continuas, que disminuya la capacidad de detectar olores, dolores o entumecimientos en la boca, específicamente en las encías, y los dientes superiores.
También se reporta el requerimiento de drenaje para eliminar coágulos de sangre, además quedará un orificio en el tabique, por lo que quedará sensible ante cualquier golpe, mientras que el aspecto estético la nariz quedará un poco desviada.
Otros riesgos que se presentan tras este tipo de intervenciones quirúrgicas se encuentran las infecciones, estas pueden presentarse por diversas razones, siendo la principal la acumulación de fluidos, y el sangrado.
Es importante destacar que para tratar los tabiques desviados, es posible que una sola intervención no sea suficiente. Tras la primera operación, los médicos se encargarán de determinar si es necesario recurrir a una nueva intervención que ayude a paliar la aparición de complicaciones.
Lo más usual es que se presenten nuevas complicaciones, con base en el tratamiento que se realizó, por lo que los médicos pueden bien corregir las nuevas dificultades que se presentan, o repetir la primera técnica hasta lograr conseguir los objetivos iniciales.
Cuidados tras una septoplastia
Después del procedimiento hay una serie de medidas que podrán ayudarte a mejorar los resultados de la intervención médica.
Lo principal es evitar hemorragias, ya que el sangrado puede pegarse en las paredes internas de la nariz y ocasionar problemas.
Como parte de las medidas que ayudan a reducir el sangrado podemos mencionar:
? No inspirar o espirar de manera brusca, lo que incluye sonarse la nariz.
? Mantener la cabeza arriba al momento de dormir. El paciente debe usar almohadas que le ayuden a permanecer elevado.
? No hacer presión en la nariz o la cabeza, evitar usar franelas cuyos cuellos sean estrechos, y tengas que forzar la prenda para que pase por la cabeza.
? Evitar movimientos bruscos que puedan hacerte sangrar.
? Evitar ejercicios físicos al menos por cuatro semanas.
? Evita el cigarrillo y el tabaco, ya que son factores que disminuyen el proceso de recuperación.
Las cirugías para corregir el tabique desviado no es necesario aplicarlo en todos los casos, por lo que será importante que hables con tu especialista, para que él determine si es necesario recurrir a una septoplastia en tu caso particular.




